A todos nos ha pasado.

Hola a todos lo primero, y gracias por pasaros estos días que no actualicé:). Venía a comentaros el nuevo diseño del blog, de las entradas, el gráfico ya lo veréis. Estoy pensando en iniciar una novela, así que si escribo sobre ella, en las etiquetas aparecerá como 'Novela' o como se titule, que todavía no lo he pensado, jaja. De momento no tengo nada más, las entradas relacionadas con la novela se dividirán casi todas las veces, en texto, un guión y una canción que recomiendo que escuchéis mientras leéis, pero eso ya es a vuestra elección.

Os dejo con un texto corto, escrito por mi, que describe bastante bien mi día, y una canción preciosa.

Un beso.

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Todos tenemos esos días, esos días que creemos que serán como todos los demás, nos levantamos cansados, y nos acostamos sin ganas de dormir. Te levantas, miras a tu alrededor, a primera vista todo está igual, el mismo caos de siempre. Y cuanto más va avanzando el día te das cuenta de que nada es como siempre; si no que todo es como antes. Ese día en el que estás más cariñosa de lo normal, en el que echas de menos cosas que pasaron por tu vida en pequeñas dosis, cosas como la felicidad. Comes, sigues tranquila, aún no sabes qué pasará por la tarde. Ves una película, y ahí explota todo. Tus sentimientos vuelven a flotar en el hondo pozo dónde los habías escondido. ¿Por qué? ¿Por qué cuando menos lo necesitas, reviven todos a la vez? ¿Lloras? ¿Chillas? No, simplemente terminas la película, para apagar el ordenador, sentarte en el suelo rodeando tus piernas con tus brazos, y mirar al vacío reorganizando tus sentimientos, y volviéndolos a ahogar en ese estupendo pozo de donde crees que no volverán a salir.

Todo ha cambiado tanto. Mírate hace dos años, y mírate ahora. Tú no eras así, tú creías en el amor. ¿Lloras ahora? No, ¿para qué llorar? Simplemente hará que te sientas peor. Te levantas, te cambias las zapatillas y sales de tu casa, ¿a dónde? Qué más da, solo quieres seguir ahogando sentimientos. Pasas por lugares, lugares familiares. ¿Lloras? Alguna pequeña lágrima hace el esfuerzo de rozar tu mejilla, por mucho que la hayas querido ocultar. Das la vuelta, qué más da ya, solo quieres que el día se acabe.

Abres la puerta de tu casa, todo son broncas, todo vuelve a ser el mismo caos que pensaste por la mañana. Gritos, voces, portazos. Te encierras en tu habitación, abres la cama, te acuestas, y terminas ese día. Ese día que se repite cada x tiempo, en el que tu vida es un poco más caótica, solo un poco.

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